Tus oraciones marcan una diferencia
Caroline Shankle
…Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no existen, como si existieran. Romanos 4:17 (RVC)
Jesús lo miró con amor. Marcos 10:21a (NVI)
Atemorizado, Josafat decidió consultar al SEÑOR y proclamó un ayuno en todo Judá. 2 Crónicas 20:3 (NVI)
Pues Dios no nos ha dado un espíritu de timidez, sino de poder, de amor y de dominio propio. 2 Timoteo 1:7 (NVI)
Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado. Romanos 5:5 (NVI)
Así dice el SEÑOR de los Ejércitos, el Dios de Israel, a todos los que envié al exilio de Jerusalén a Babilonia: «Construyan casas y habítenlas; planten huertos y coman de su fruto. Jeremías 29:4-5 (NVI)
Como era su costumbre, Pablo fue al servicio de la sinagoga y, durante tres días de descanso seguidos, usó las Escrituras para razonar con la gente. Hechos 17:2 (NTV)
Nosotros amamos porque él nos amó primero. 1 Juan 4:19 (NVI)
Como el SEÑOR le había hablado, Agar le puso por nombre «El Dios que me ve», pues se decía: «Ahora he visto al que me ve». Génesis 16:13 (NVI)
…—La venida del reino de Dios no es algo que se pueda observar. No van a decir: “¡Mírenlo acá! ¡Mírenlo allá!”. Dense cuenta de que el reino de Dios está entre ustedes. Lucas 17:20b-21 (NVI)
Oh, pueblo, confía en él siempre, derrama ante él tu corazón, pues Dios es nuestro refugio. Salmo 62:8 (NVI)
…Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama las cosas que no existen, como si existieran. Romanos 4:17 (RVC)
Por tanto no desfallecemos, antes bien, aunque nuestro hombre exterior va decayendo, sin embargo nuestro hombre interior se renueva de día en día. Pues esta aflicción leve y pasajera nos produce un...
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
—Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho por ti. Así que el hombre se fue y proclamó por todo el pueblo lo mucho que Jesús había hecho por él. Lucas 8:39 (NVI)