El peligro de la deriva
Sharon Jaynes
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
A pesar de todo, SEÑOR, tú eres nuestro Padre; nosotros somos el barro y tú el alfarero. Todos somos obra de tu mano. Isaías 64:8 (NVI)
Adelántese ahora mi señor a su siervo; y yo avanzaré sin prisa, al paso del ganado que va delante de mí, y al paso de los niños… Génesis 33:14 (NBLA)
Me buscarán y me encontrarán cuando me busquen de todo corazón. Jeremías 29:13 (NVI)
Hagan brillar su luz delante de todos, para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben a su Padre que está en los cielos. Mateo 5:16 (NVI)
Asimismo, las ancianas deben ser reverentes en su conducta, no calumniadoras ni esclavas de mucho vino. Que enseñen lo bueno, para que puedan instruir a las jóvenes a que amen a sus maridos, a que amen a sus hijos, a que sean prudentes, puras, hacendosas en el hogar, amables, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada. Tito 2:3-5 (NBLA)
Ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios lo cambió en bien para que sucediera como vemos hoy, y se preservara la vida de mucha gente. Génesis 50:20 (NBLA)
…toda carne es como la hierba, y todo su esplendor es como la flor del campo. … Se seca la hierba, se marchita la flor, Pero la palabra de nuestro Dios permanece para siempre. Isaías 40:6-8 (NBLA)
En mi lecho me acuerdo de ti; pienso en ti en las vigilias de la noche. Salmo 63:6 (NVI)
En él también ustedes, cuando oyeron el mensaje de la verdad, el evangelio que les trajo la salvación, y lo creyeron, fueron marcados con el sello que es el Espíritu Santo prometido. Este garantiza nuestra herencia hasta que llegue la redención final del pueblo adquirido por Dios, para alabanza de su gloria. Efesios 1:13-14 (NVI)
Las palabras amables son como la miel: dulces al alma y saludables para el cuerpo. Proverbios 16:24 (NTV)
Por tanto, debemos prestar mucha mayor atención a lo que hemos oído, no sea que nos desviemos. Hebreos 2:1 (NBLA)
—Vuelve a tu casa y cuenta todo lo que Dios ha hecho por ti. Así que el hombre se fue y proclamó por todo el pueblo lo mucho que Jesús había hecho por él. Lucas 8:39 (NVI)
pero el ángel los tranquilizó. «No tengan miedo—dijo—. Les traigo buenas noticias que darán gran alegría a toda la gente. ¡El Salvador—sí, el Mesías, el Señor—ha nacido hoy en Belén, la ciudad de...
Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene. Salmo 63:8 (NVI)